Trabajo realizado por Pablo Robledo

La evolución de la figura de la mujer en el mundo del fútbol ha sido un viaje lleno de obstáculos y barreras que han ido más allá del propio terreno de juego. Históricamente las raíces del fútbol han estado marcadas en tradiciones masculinas, pese a estas raíces, la mujer ha seguido luchando por hacerse un hueco en este deporte.

Sabemos que las mujeres antiguamente han sido relegadas a roles secundarios, aunque lo cierto es que muchas otras decidieron desafiar los estereotipos ya asentados en la sociedad y comenzaron a poner en práctica el balompié en partidos informales. Durante la Primera Guerra Mundial, la escasez de hombres dio pie a un aumento temporal de la participación femenina en el fútbol. Sin embargo, estos avances fueron efímeros, ya que la sociedad volvió a restringir y a cohibir la participación de las mujeres en este deporte, y por ende, su libertad. La década de 1920 presenció un resurgimiento de equipos y competiciones femeninas, aunque estos esfuerzos a menudo fueron minimizados y marginados.

Fue en la década de 1970 cuando el fútbol femenino comenzó a emerger como una fuerza con la creación de la Asociación Mundial de Fútbol Femenino. Este hito sentó las bases para que se reconociera el fútbol femenino mundialmente, pero de nuevo la falta de visibilidad y de inversión frenaron el asentamiento de la mujer en este deporte. El verdadero punto de inflexión llegó con la celebración de la primera Copa Mundial Femenina de la FIFA en 1991. Este evento no solo realzó el estatus internacional del fútbol femenino, sino que también proporcionó una plataforma global para el talento de las mujeres. Desde entonces, el fútbol femenino se encuentra en un auge constante, gracias a jugadoras que han dado un paso al frente en nombre de la mujer.

En el siglo XXI, la lucha por la igualdad de género en el fútbol ha aumentado su visibilidad, patrocinio y participación, aunque obstáculos como la disparidad salarial y sobre todo el machismo que se produce reiteradamente en partidos femeninos son la lacra de está disciplina. Hoy, la figura de la mujer en el fútbol va más allá de ser simplemente una jugadora.

Mujeres entrenadoras, árbitras, ejecutivas y líderes influyentes han emergido, desafiando normas preestablecidas y demostrando que el fútbol es un terreno compartido, haciéndose un hueco en este deporte por sus propios méritos.

En este reportaje analizaremos le evolución de la mujer en el mundo del fútbol, así como las polémicas machistas y sexistas que siguen dándose en el día a día y que como sociedad debemos erradicar.